El Estado de la Unión Europea - El Parlamento Europeo ante unas elecciones trascendentales

EL ESTADO DE LA UNIÓN EUROPEA 94 del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, con el objetivo de que dichos fondos extra mitigasen la presión fiscal de un país en recesión. De esta manera, el sistema contribuiría considerable- mente a una estabilización fiscal más fiable frente a crisis asimétricas y, en cierta medida, también frente a crisis simétricas. La medida en la que se permitiría que los distintos tramos registraran déficits para au- mentar el efecto estabilizador, más allá del funcionamiento de un fondo puramente de reserva, dependerá de la credibilidad del marco institucional general. En cualquier caso, a los Estados miembros que registren déficits en sus tramos nacionales se les exigi- ría que aumentasen su aportación una vez recuperadas sus economías. Las simulaciones basadas en estos principios muestran un considerable potencial de estabilización eco- nómica con respecto al sistema, con unos costes netos mínimos para sus contribuyen- tes a lo largo del tiempo. Esta forma de se- guro de desempleo consistiría tanto en una institucionalización de la política económica anticíclica como en una forma de solidaridad que facilitaría las cosas a los ciudadanos de la zona euro. Tercera medida. Trabajar en la era de los desafíos digitales, la Cuenta Personal de Actividad La Cuenta Personal de Actividad se propuso como objeto de debate en el libro blanco deno- minado Reimaginar el Trabajo. Trabajo 4.0 ., ela- borado por el Ministerio Federal de Trabajo y Asuntos Sociales de Alemania. Esta cuenta per- mitiría una política social basada en la vida labo- ral del ciudadano y respondería mejor a sus ne- cesidades particulares 14 . Se hace también referencia a experiencias similares en otros paí- ses de la UE, lo que podría convertirlo en un proyecto colectivo centrado en las políticas so- ciales y de trabajo 15 . Esta cuenta se crearía para todo el que entre en el mercado laboral. Aunque existen múltiples diferencias puntuales, sobre todo en relación con la financiación y los “derechos de cobro”, todos los enfoques comparten el objetivo de in- crementar la autonomía individual, en compara- ción con la actual organización de las prestacio- nes del estado del bienestar. Mediante la transferencia de recursos públicos o el apoyo proporcionado por la acumulación de activos procedentes de sus propias contribuciones en una cuenta, el trabajador debería estar en con- diciones de adaptarse según su propio criterio a las demandas cambiantes, utilizando para ello los fondos disponibles. Esto resulta un proble- ma, sobre todo en lo que respecta a crear un colchón económico para cubrir vacíos en la vida laboral o periodos de trabajo a media jornada, un desarrollo profesional continuo o una reorientación profesional, aunque también en lo que respecta a facilitar la transición hacia la ju- bilación. Las cuentas podrían complementar o sustituir a otras prestaciones sociales. Ya existen enfoques similares en cinco países europeos, cada uno de los cuales tiene una es- tructura diferente: la cuenta personal de activi- dad en Francia ( Compte Personnel d’Activité o 14   https://www.bmas.de/SharedDocs/Downloads/EN/PDF- Publikationen/a883-white-paper.pdf; jsessionid=F7A03817 C6861C736FAC36A252301231?__blob=publication File&v=3 15   https://www.bmas.de/SharedDocs/Downloads/DE/PDF- Publikationen/Forschungsberichte/fb493-persoenliches- erwerbstaetigenkonto.pdf; jsessionid=2BD8D0F1A87F32CB 1AAF5D280457F71F?__blob=publicationFile&v=3

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