EL ESTADO DE LA UNIÓN EUROPEA. Ante una nueva legislatura europea

EL ESTADO DE LA UNIÓN EUROPEA 112 El Sur Global: más ofertas y menos llamamientos, por favor En un mundo geopolítico y geoeconómico cada vez más hostil, Europa debe equilibrar cuidadosamente sus obje- tivos estratégicos de seguridad del suministro, protección del clima y competitividad. Como hemos dicho, el acceso a las materias primas y a las importaciones energéticas son elementos vitales; descuidarlo pone en peligro tanto la prosperidad económica como la paz social. Y la tran- sición climática no puede gestionarse sin ellas. En ese sentido, China es el elefante de la habitación: ya sea en África o en América Latina, cualquier lugar al que Occi- dente acuda en busca de las preciadas materias primas, China ha llegado antes. Y el gigante asiático no se irá a ninguna parte. Otras economías emergentes también están reactivando o profundizando sus relaciones con los países del Sur Global. Son competidores en la carrera por las materias primas esenciales, sin las cuales no es posible atender ni a la transición energética ni a la digita- lización. Sin suministro de materias primas y energía, será muy difícil que los países industrializados mantengan su base industrial y sigan el ritmo de creación de nuevos sectores competitivos. A los países del Sur Global no les interesa tomar partido en la creciente polarización geopolítica, por ra- zones tanto de convicción como de interés. Esto puede ser decepcionante desde una perspectiva europea, como ocurrió con las respuestas a la invasión rusa de Ucrania. Pero sin duda esta neutralidad sale rentable a los países emergentes y en desarrollo: si hay varios socios comercia- les potenciales, se puede elegir la mejor oferta.Y, en este sentido, lo más probable es que no solo pese el precio, sino también las propuestas para construir sus propias industrias locales y transferir tecnología. Actualmente se buscan y prometen nuevas asociacio- nes en el sector energético.Aquí, Europa debe realmente cumplir y servir no sólo a sus intereses propios y más urgentes, sino también a los de sus socios comerciales, sobre todo porque sus competidores también se están adaptando a la situación cambiante. Por ejemplo, China tiene la reputación de interesarse sólo por las materias primas y productos agrícolas, que se exportan en estado bruto a la República Popular para ser procesados allí; pero ahora atiende a los deseos de sus socios comer- ciales. En Chile, la construcción de una fábrica conjunta de baterías de iones de litio con una empresa nacional puede ser un buen anticipo de lo que está por venir. Para los europeos también es importante sopesar honestamente los intereses y ser realistas en cuanto al margen de maniobra, a la vez que desarrollan una estrategia clara en este ámbito. En el futuro, la UE ten- drá que practicar un difícil equilibrio: por un lado, se trata de cumplir con sus elevados estándares sociales y ecológicos en otras partes del mundo, promoviendo sus valores en la carrera geoestratégica; pero, al mismo tiempo, Europa ya no podrá pretender dictar a otros países cómo deben actuar, si quiere evitar acusaciones de neocolonialismo. Esto implica a menudo equilibrar una aparente am- bivalencia. Los intereses de las comunidades locales cercanas a los lugares de extracción de materias primas codiciadas suelen ser distintos de los de sus Gobiernos nacionales. Las primeras han de combatir los perjuicios de la extracción de recursos sobre la salud y los medios de subsistencia; los segundos ven los efectos positivos en los presupuestos nacionales y las reservas de divisas. Las ambiciosas normas sociales y medioambientales suelen tener en el Sur Global la reputación de proteccionismo disfrazado. Concluir los deseados acuerdos comerciales y, al mismo tiempo, satisfacer las exigencias ecológicas y so- ciales de la UE no es en absoluto una conclusión previsible. Pacto Verde 2.0 europeo en condiciones difíciles La política industrial y la financiación de las tecnologías limpias probablemente figurarán entre las prioridades de la próxima Comisión, especialmente a la vista del fracaso de los esfuerzos por establecer un Fondo para la Sobera- nía Europea en julio de 2023. Deberían también ocupar

RkJQdWJsaXNoZXIy MTAwMjkz