EL ESTADO DE LA UNIÓN EUROPEA. Ante una nueva legislatura europea

EL ESTADO DE LA UNIÓN EUROPEA 58 o las capacidades adquiridas lo serán de los EE. MM. o empresas participantes, quienes decidirán, en última instancia, qué destino darles. Para poder conocer el estado de las capacidades de defensa de los EE. MM. y permitir la actuación coordi- nada, se ponía en marcha en 2017 la Revisión Anual Coordinada en Defensa. Este proceso —CARD, por sus siglas en inglés— encomendado a la AED, realiza a lo largo de un año una evaluación del panorama de la de- fensa europea, analizando la información que procede de los planeamientos de defensa nacionales desde la pers- pectiva de las prioridades de desarrollo de capacidades europeas (EDA 2023). Pretende ofrecer un diagnóstico de las necesidades conjuntas para permitir que los ins- trumentos con los que cuenta la UE (FED, PESCO, etc.) puedan dirigirse a apoyar proyectos colaborativos entre entidades públicas y privadas de los EE. MM. para paliar esas limitaciones. Su objetivo a largo plazo es ir consi- guiendo un progresivo alineamiento de los planeamien- tos y desarrollos de capacidades nacionales, buscando la complementariedad y europeización de las políticas de defensa nacionales. Al mismo tiempo, en diciembre de 2017, el Consejo aprobaba la solicitud de veinticinco EE. MM. de activar la Cooperación Estructurada Permanente (PESCO), para asumir compromisos más vinculantes en relación a la defensa y lanzar proyectos cooperativos entre grupos de EE. MM. para desarrollar capacidades tanto militares como institucionales (Decisión (PESC) 2017/2315). La PESCO supone una innovación política relevante, en la medida en que permite la flexibilidad, de forma que los EE. MM. deciden en qué proyectos cooperar y comprome- ter sus recursos según sus filosofías e intereses concretos. Así, a título de ejemplo, podemos ver cómo los Estados neutrales o con filosofías de potencia civil se decantan por la participación en proyectos sobre seguridad. La PESCO también supone el robustecimiento de una po- lítica intergubernamental con una cierta limitación de soberanía, ya que los participantes asumen compromisos jurídicamente vinculantes; los resultados son sometidos a evaluación; una vez dentro del proyecto las decisiones se toman por mayoría cualificada; y existe la posibilidad de sancionar al Estado incumplidor con la expulsión. Consecuencia del referéndum sobre defensa celebrado, Dinamarca se uniría a la PESCO en mayo de 2023, sien- do en la actualidad Malta el único Estado miembro no participante (Decisión (PESC) 2023/1015). En la fecha en que se escribe ya se han aprobado un total de 72 proyectos y se han cerrado 3 por decisión de sus miembros (Decisión (PESC) 2023/995). Son muy variados: los hay desde el desarrollo de material militar específico o munición, hasta la configuración de estructu- ras, logísticas o institucionales para apoyar operaciones; plataformas de cooperación entre EE. MM., o estructuras de entrenamiento o formación. Analizando la totalidad de ellos, se puede constatar que, en este momento, la PESCO persigue cuatro objetivos diferenciados: reducir el número de sistemas de armamento existentes; refor- zar la cooperación operacional entre EE. MM.; conectar las tropas a través de la interoperabilidad; y fortalecer la competitividad industrial y la innovación. Como en el caso del FED, las capacidades militares desarrolladas bajo este formato son de titularidad de los participantes, que pueden decidir aplicarlas en el marco de la UE o en otras operaciones internacionales bajo mandato de la ONU o de la OTAN. De los proyectos, si nos atenemos a la financiación, unos son muy ambiciosos, otros más limitados; y, en cuanto al interés que han recibido por parte de los Esta- dos miembros, también la participación es muy diversa: así el más multitudinario es el de Movilidad Militar, en el que participan la totalidad de los miembros PESCO, e incluso Estados terceros 6 , mientras que hay varios proyec- tos con solo dos participantes. En cuanto al compromiso, se ve diferente implicación de la práctica totalidad de los Estados, si bien aquí también se detecta que los grandes 6  En este proyecto se ha autorizado por parte del Consejo la par- ticipación de algunos Estados pertenecientes a la OTAN, que habían mostrado su interés, como Estados Unidos, Canadá, Noruega y Reino Unido, dado que la movilidad militar también es una de las líneas de acción de la cooperación UE-OTAN.