CINE Y PEDIATRIA 4

18 frente a otras sobre el mismo tema. Porque al extenso conocimiento profesional del autor, hay que sumar las vivencias, patologías, traumas e ilusiones que protagonizan los personajes de las películas analizadas. Y como si fueran historiales clínicos, las voces e imágenes de todas esas películas –bajo el preciso y lúcido análisis de Javier González de Dios– nos muestran un vasto y complejo retrato social y cultural del mundo infantil y adolescente. Un retrato impagable, que enriquece no solo a la profesión médica, sino a cuantos estamos interesados en el tema. Y no hace falta resaltar que este es un tema de vital importancia para nuestra sociedad, para el entorno familiar o para colectivos tan importantes como el de los educadores. Otro de los grandes aciertos de esta obra es la amplia y variada selección de películas que recoge. Como muestra, basta comprobar que en el presente volumen se habla de películas tan dispares en temática, cultura o época como El chico (1921), de Charles Chaplin; Osama (2003), de Siddiq Barmak; o La vida de Adèle (2013), de Abdellatif Kechiche. Y resulta paradójico constatar que esta extensa y dilatada obra tenga su origen en un blog donde el autor comenzó a desgranar sus conocimientos profesionales y cinéfilos, poniéndolos al servicio de los internautas. De ahí salió el material para el primer volumen y de ahí han seguido alimentándose todos los demás. Una labor encomiable que Javier sigue manteniendo, día tras día, con el mismo entusiasmo y rigor de siempre. Todo un paradigma sobre la importancia de las nuevas tecnologías y sobre el uso y aprovechamiento efectivo de las mismas. Ojalá que esta ventana abierta por Javier González de Dios, este puente entre el cine y la profesión médica, sirva de ejemplo para seguir consolidando proyectos similares que nos ayuden a entendernos más y mejor, a comprender y respetar al otro, y a seguir soñando con nuevas ilusiones. Montxo Armendáriz Director y guionista de cine

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