CINE Y PEDIATRIA 7

cine y pediatría 7 23 ¡ S iete tomos ya de Cine y Pediatría ! Y difícil tarea –para alguien como yo, ni cineasta ni pediatra ni docente– la de escribir un prólogo desde el punto de vista de la docencia; la de tomar el testigo de Lary León y de sus cinco predecesores en esta responsabilidad: José Elías García Sánchez, Pablo González Blasco, Samuel Gómez Muñoz, José Luis Pedreira Massa y Pablo Huerga Melcón. Al que fuera catedrático de patología general en Madrid a finales del siglo XIX, José de Letamendi, se le atribuye la siguiente sentencia: “De quien te diga que solo sabe de Medicina, ten por seguro que ni Medicina sabe” . Y, al fin y al cabo, Letamendi fue un médico humanista, que escribió sobre Medicina, sí, pero también sobre literatura, derecho, arte y economía, además de diversas composiciones musicales. Es comprensible que un médico polímata como él se expresara de tal manera. Pero es que incluso un científico eminentemente práctico y nada sospechoso de veleidades artísticas, como el neurocirujano portugués Egas Moniz, premio Nobel de medicina y fisiología en 1949 por su operación de lobulotomía prefrontal, llegó a afirmar: “Os médicos carecem de uma vasta cultura geral e esta não se compreende sem uma sólida base artística. Aqueles que se acantoam nas suas preocupações científicas, sem de vez em quando elevarem os olhos para o alto, para os brilhantes domínios da arte, não possuem educação completa” . No poseen educación completa; Egas Moniz es tajante. ¿Por qué? ¿Por qué tantos médicos están convencidos de algo en apariencia tan extraño: que la Medicina solamente puede entenderse de forma cabal fuera de ella misma? Esta convicción deriva –creo yo– de una carencia de la Medicina científica tal como ha llegado hasta nosotros. Dado que el número de enfermos es prácticamente infinito, al aprendiz de Medicina –que es lo que en definitiva somos todos los médicos de por vida– le resulta imposible conocer y memorizar absolutamente todos los cuadros sintomáticos posibles. Desde antiguo, los grandes maestros de la Medicina –con Thomas Sydenham y su concepto de las “especies morbosas” a la cabeza– se han Prólogo Desde el punto de vista de la docencia “ El cine, lección de humanidad “

RkJQdWJsaXNoZXIy MTAwMjkz