CINE Y PEDIATRIA 8
78 Cine y Pediatría [372] los médicos, quizás solo un fémur algo más corto, pero ellos intuían algo. Tras la alegría inicial del nacimiento, percibieron que su hijo tenía síndrome de Down y el diagnóstico cromosómico lo confirmó días después. A los 10 días de nacer, Bernardo comenzó a escribir su blog, “La historia de Jan”, una forma de expresar con palabras el tsunami de sentimientos que se cruzaban en sus vida, una ayuda para el duelo, con el paso del dolor a la superación, y de esta a la aceptación. Y allí se cruzaban los mensajes positivos ( “Miro a Jan y me lleno de amor…” ) con las dudas ( “¿Crees que podré jugar al fútbol con mi hijo?” ). Grabar cuando el síndrome de Down ha llegado a sus vidas les ha servido de terapia personal, pero también de herramienta para derrumbar prejuicios contra ese trastorno genético que consiste en tener un cromosoma 21 de más. Y en la película pasan los días, las semanas, los años, los cumpleaños y las Nocheviejas en familia… Y Jan crece mientras sus padres luchan para darle el mejor porvenir. Y en el camino comienza la atención precoz, los distintos métodos de fisioterapia (Vojta, Le Métayer…), la fisioterapia respiratoria, el inicio de la escuela infantil, la aproximación a la Fundación Síndrome de Down Madrid (y el recuerdo a las 132 fotografías de la exposición “Más allá de un rostro”), el inicio de la escolarización… Y en el camino, cada publicado: sábado 25 de febrero de 2017
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