TODAS LAS FORMAS DE DECIR TU NOMBRE

[ 258 ] [ 259 ] Dos patas para un banco Era tan bella como despertar con besos de menta y olor a café, con la edad de esperar un amor sin prisas que deseara quedarse a leer el futuro en sus ojos de ensueño. Madrugaba de casa con una sonrisa carmín que repartía promesas de un día de besos y perfume a lavanda. Con andares de bella sencilla que llenaba las calles del barrio de rimas y risas. Regresa en la tarde y sentada en el banco de siempre inauguraba la fiesta de palomas y avecillas de ropaje simple dichosos de verla, que traían noticias en clave, mensajes cifrados o versos que esconden noticia de amantes lejanos, excusas de ausencias sin fuero. Solo un instante de tristeza nublaba su cara, pero agradecida invitaba a la parroquia de fieles amigos con los manjares que atesoraba en una bolsita de papel de estraza. Tómate tu tiempo Dices que perdiste, acaso, un instante precioso de tu vida. Imagínate sin poder retenerlo en tu recuerdo, imagina la felicidad sin ese instante y entonces... entonces sabrás si lo perdiste.