TODAS LAS FORMAS DE DECIR TU NOMBRE

[ 60 ] [ 61 ] A veces pasa, que amanece y sale el sol, y eres tú quien acude a mi llamada, con el alma en la mano, y acaricias mi cara, ¡a veces pasa! El olfato y la memoria Me sabe amargo amarte en la distancia de una ciudad lejana amurallada, en el cuarto de un hotel para viajeros ya vencidos, sin más de ti que el aroma de un tabaco, o el paso fugaz junto a la barra de un ángel que usa tu perfume. He caminado solo por calles del todo nuevas para mí, que se tornaban otrora conocidas, hilvanado una quimera en mi cabeza trastornada de tu imagen caminado por la acera, reflejada en los espejos de las tiendas. Me reconcilié con las palomas que se cagan generosas en la sienes de la panda de ladrones y asesinos que siembran con su efigie tantas plazas. No les bastaba con la lista de guerras y crueldades, el reguero de sangre de inocentes, el despojo organizado de los pobres, ensuciando los libros y las aulas con la historia de sus crímenes salvajes.