RECOMENDACIONES
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– Reforzar la posición europea en la economía de internet, facilitando
el apoyo de la Comisión Europea y de los Estados para la creación
de un consorcio internacional, con apoyo público y privado, a modo
de “Airbus digital”, para generar un gran buscador europeo en
internet, que se sitúe en el marco europeo interior y en el contexto
global, y que sea capaz de competir con las grandes empresas pro-
veedoras de contenidos e información.
5. El Tratado de Libre Comercio UE-EE. UU. (TTIP)
– El acuerdo es una oportunidad para Europa siempre y cuando sea
equilibrado y condicionado al respeto al acervo político y social eu-
ropeo. Su formulación final ha de contribuir a impulsar el crecimien-
to económico y la creación de puestos de trabajo, y favorecer a
todas las empresas, especialmente a las pymes, y no solo a las gran-
des corporaciones.
– El TTIP deberá preservar las normas europeas de seguridad alimen-
taria, la protección de datos personales y no tener efectos negativos
sobre la protección social, del consumidor, medioambiental, los de-
rechos laborales o la diversidad cultural.
– En cuanto que es también un tratado de inversión, el TTIP debería
incluir un capítulo de cooperación financiera con el compromiso
expreso por ambas partes de eliminar las malas prácticas de los
bancos y evitar futuras crisis. O, a falta de ello, EE. UU. y la UE
deberían firmar otro acuerdo fuera del TTIP que compense esa ca-
rencia.
– Deberá respetar los procedimientos jurídicos regulares en la solu-
ción de diferencias entre inversores y Estados, incorporando salva-
guardas y mecanismos, como un Tribunal sobre Comercio e
Inversión, en la línea del Tratado UE-Canadá.
– Hay que profundizar en la transparencia del proceso de negociación,
en la línea de lo comprometido por la Comisaria Cecilia Mällstrom, y
promover que la ratificación del tratado se produzca en su momento
por parte del Parlamento Europeo. Para hacerlo posible, debería
acompañarse de una ronda de consultas amplias con los gobiernos,
parlamentos nacionales y los sectores afectados.
6. La reforma del sistema financiero
– La Unión Europea tiene que dotarse de un sistema financiero inte-
grado, es decir, hay que acabar con la fragmentación financiera,
que se explicita sobre todo en distintos tipos de interés en el crédito
minorista según el Estado miembro.