POLÍTICA MONETARIA Y ECONOMÍA PRODUCTIVA EN LA EUROZONA
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los recursos captados “han contribuido consi-
derablemente” o “han contribuido de alguna
forma” al impulso del crédito (
Gráfico 8
).
Estos datos dejan en evidencia, por un lado,
la notoriedad con la que se transmite que los
recursos recibidos del Eurosistema no se desti-
nan a los fines de la política monetaria. Por otro
lado, acreditan también la enorme dimensión
de este desvío de recursos con respecto al con-
junto de la política monetaria de la eurozona
y, por supuesto, con respecto al conjunto de la
economía europea.
La significación del programa TLTRO
Desde la perspectiva de nuestro informe, el pro-
grama Targeted TLTRO, basado en operaciones
“focalizadas” de expansión cuantitativa a largo
plazo, tiene un especial interés.
El programa TLTRO tiene precisamente como
característica fundamental esa indicada “focali-
zación”. Si el conjunto de la expansión moneta-
ria en la eurozona se materializa a través de la
entrega de recursos a los bancos sin ningún tipo
de requisito que vincule la captación de estos
fondos a su destino, el programa TLTRO consti-
tuye, en este sentido, una excepción.
En efecto, este programa se basa en présta-
mos otorgados a los bancos con la condición de
que se produzca un incremento del saldo total
de los créditos del banco receptor.
Este programa, que preveía canalizar “un
mínimo de 1,14 billones de euros”, ha entre-
gado ya más de 0,4 billones de euros al sistema
bancario europeo.
Sin embargo, los resultados de este aparente
esfuerzo de focalización son más que limitados.
Veamos, en primer lugar, los resultados del aná-
lisis que el propio BCE realizó en julio de 2015, ba-
sado en los cambios registrados en el balance de los
bancos receptores del programa TLTRO (
Gráfico 9
).
Como vemos, parece evidente que, también
en el caso de las TLTRO, el éxito en el destino
de estos fondos al crédito bancario es muy li-
mitado.
Gráfico 9.
Cambios en el balance de los bancos receptores del programa TLTRO.
Fuente: BCE
.