INTRODUCCIÓN. LA TORMENTA PERFECTA
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o los planes de reubicación de quienes están en Grecia e Italia y de reasen-
tamiento de los refugiados que aún no han llegado a Europa.
Todo ha estallado con el incalificable cierre de fronteras de países de la UE,
que ha atrapado a decenas de miles de refugiados en una ratonera. Y que ha
desembocado en un acuerdo de la UE con Turquía directamente contrario del
Convenio de Ginebra. Como explican Estrella Galán y Paloma Favieres en este
informe, la crisis de los refugiados es más bien una crisis europea. Estamos
hablando de un número de personas que no sobrepasa el 0,2% de la pobla-
ción de la UE y que serían integrables en nuestro tejido social y económico.
Incluso con beneficios para nuestras envejecidas poblaciones.
Cuando se rompen valores tan importantes como la solidaridad y el
derecho a obtener asilo, otros principios saltan también por los aires. Es
el caso de la libre circulación de personas, que estaba asegurada por el
tratado Schengen.
La libertad tiene vinculaciones evidentes con la seguridad. Los recien-
tes atentados terroristas de Londres, París y Bruselas han contaminado de
inseguridad a Europa, y han puesto de relieve el desamparo que podemos
llegar a tener. Una vez más, los ojos miran a Bruselas –por un macabro do-
ble motivo– y se encuentran con un vacío de política de seguridad europea
y de coordinación de Gobiernos. Es un problema de amplio espectro, que
Enrique Ayala expone con detalle en estas páginas.
La reacción de grandes sectores de población –y el consiguiente se-
guidismo electoralista de demasiados gobiernos– ha sido exactamente la
contraria de la que debiera. El nacionalismo populista se ha convertido en
el enemigo del proyecto europeo a una enorme velocidad. El resultado no
puede ser más que la fragmentación política de ese proyecto deteriorado.
Los ejemplos los tenemos muy presentes, y a ellos se refieren José Manuel
Albares, Carlos Carnero y Antonio Villafranca, que hacen un recorrido por
los países europeos cuyas políticas nacionales son políticas “europeas”
aunque no sean “europeístas”.
Hay, por supuesto, ejemplos a nivel regional. El caso de Cataluña en
España, con la huida hacia delante de seguidores del independentismo. Y
hay un caso predominante a nivel nacional, el Reino Unido. La iniciativa de
Cameron es otro escapismo ante la amenaza interna en su propio partido.
El capítulo escrito por Juan Moscoso se refiere a esta cuestión, y, natural-
mente, a las respuestas de Bruselas en un humillante Consejo Europeo
para olvidar, o mejor, para no olvidar.
El pacto con Cameron no es solo una vía libre a sus exigencias, sino que
afecta directamente al proyecto de la UE. Es una enmienda a la totalidad