LOS ESTADOS ANTE EL FUTURO DE EUROPA
23
contrario
, quieren una integración…”
21
, y en
tercer lugar, al menos en la presentación oficial
de Tusk, por encima de estas divergencias, to-
dos muestran una actitud positiva, lo que per-
mite contemplar con un cierto optimismo el re-
sultado del debate, a pesar de que este haya
sido insuficiente y estuviera aún, como es habi-
tual en los debates del Consejo Europeo, afec-
tado de una gran falta de transparencia que
impide saber qué jefes de Estado o de Gobierno
están en el primer grupo reseñado por Tusk y
cuáles en el segundo.
Si este debate informal del Consejo Europeo
de marzo de 2017 en torno a las cuestiones que
plantea el
Libro blanco
de la Comisión Europea
fuera el primero y único en tener lugar, habría
que lamentarlo porque la cuestión esencial
planteada implícitamente por el
Libro blanco
no
es ni más ni menos que la cuestión de la Unión
Política Europea, que es una cuestión necesita-
da de deliberación constante (y no solo tras el
brexit
) y a la que hay que dar respuestas claras
aunque no sean unánimes en cada una de las
fases (progresivas o regresivas) del proceso de
integración
22
.
Pues bien, imaginemos que además de ese
minidebate informal, los miembros del Consejo
Europeo fueran llamados a escoger uno de los
cinco escenarios descritos por la Comisión en su
Libro blanco sobre el futuro de Europa
.
21
Vid. supra
, nota a pie de página n.º 18. La cursiva es
nuestra.
22
Con ocasión de la primera discusión sobre el Marco
Financiero Plurianual 2021-2027, en la reunión informal del
Consejo europeo del 23 de febrero de 2018, se ha puesto
de manifiesto que algunos miembros del Consejo Europeo
habrían señalado la necesidad de concluir la discusión sobre
los escenarios del futuro de Europa antes de decidir sobre el
presupuesto de la Unión.
A no ser que se impusiera el escenario n.º 1,
es decir: “Seguir igual”
23
, los cinco escenarios
del
Libro blanco sobre el futuro de Europa
, a la
hora de la verdad, se reducirían probablemente
a dos: el n.º 3 (“Los que desean hacer más, ha-
cen más”) y el n.º 4 (“Hacer menos pero de for-
ma más eficiente”).
El escenario n.º 2, es decir: “Solo el mercado
único”
24
, no lo ha reivindicado hasta el día de la
fecha, como opción exclusiva, ningún miembro
del Consejo Europeo, ni siquiera el jefe de Go-
bierno del Estado más euroescéptico de los ve-
teranos, el Reino Unido
25
.
El escenario n.º 5, es decir: “hacer mucho
más conjuntamente” (y el idealismo –en el buen
sentido– maximalista que lo anima), parece
abandonado ya por todos los líderes políticos,
incluso por los más europeístas
26
. Al día de la
fecha, en efecto, ningún jefe de Estado o de
Gobierno ni ningún jefe de partido lo ha defen-
dido claramente.
Hay que recordar, como hace la Comisión en
el
Libro blanco
, que hay muchos solapamientos
entre los escenarios y, por lo tanto, no son ni
mutuamente excluyentes ni exhaustivos.
En todo caso, salvo alguna convulsión elec-
toral de envergadura (poco probable una vez
23
Vid.
: Libro blanco sobre el futuro de Europa, p. 16. Dis-
ponible en:
https://ec.europa.eu/commission/sites/beta-po litical/files/libro_blanco_sobre_el_futuro_de_europa_es.pdf24
Ibid.
, p. 18.
25
Vid.
la carta de David Cameron a Donald Tusk de 10
de noviembre de 2015. Disponible en:
https://www.gov. uk/government/uploads/system/uploads/attachment_data/ file/475679/Donald_Tusk_letter.pdf26
La frase de Jean-Claude Juncker, “Il faut cesser de parler
des États Unis d’Europe” (Conferencia en el Instituto Jac-
ques Delors, París, abril de 2016) es un símbolo del actual
repliegue del discurso federalista europeo. No obstante, en
su
Discurso sobre el Estado de la Unión
de septiembre de
2017, Juncker ofrece lo que él llama un “sexto escenario”,
cuya descripción presenta rasgos voluntaristas equiparables
a los del escenario n.º 5 del
Libro blanco
de la Comisión.